Hispania Gothorum

Si existe una ida definitoria y por ende forjadora de la identidad Hispánica, esta será el ideal de reconquista y el afán de recuperación de la “Hispania Gothorum” o Hispania Goda. Dicho ideal no se corresponde con el reino visigodo de Toledo, si no que toma su sentido a raíz de la invasión arábiga de la península.

Cuando esto ocurre, los germanos e hispanos romanos, antaño separados, e incluso dotados de corpus jurídicos diferentes, que no habían cedido ante la presión de los invasores, se reúnen en los reinos astures y cántabros del norte, forjándose una alianza definitiva cuyo fin será la expulsión del islam de nuestra tierras y el proyecto de recuperación de una entidad pasada (más ideal que histórica), que es llamada “Hispania Gothorum” por las fuentes de la época y que en realidad, poco tiene que ver con el dominio germánico de la península (los godos se sentían únicamente godos, nunca tuvieron ese sentimiento nacional), si no que se trata más bien de un proyecto basado en la unión de la herencia romana y germana, cuyo catalizador será un cristianismo de tintes claramente nacionalistas. La presencia de un enemigo común realmente agresivo y expansivo, hace que las pequeñas rencillas del pasado se destierren en nombre de un fin mayor y por supuesto más excelso.

Esto desencadenará un proyecto que se extiende a lo largo de todo el medievo hispánico, iniciándose con la gesta de Covadonga y culminando con la toma final de Granada (último bastión del islam en nuestra patria) y el matrimonio de los Reyes Católicos que supondrá la unidad en facto de la península. Hablo en facto, porque este matrimonio convierte la unidad en un hecho con reflejo político, jurídico e institucional, pero no es un echo forjado ex-novo sino que se trata de la última etapa de algo que había comenzado hace siglos, pues si bien la reconquista es obra de diversas entidades políticas independientes (los Reinos Hispánicos), si existía un clara unidad ideológica basada en la recuperación de esa entelequia llamada Hispania Gothorum.

Igualmente, esto nos recuerda que el Reino de Portugal es también parte de ese macro proyecto político, siendo a nuestro entender un perfecto sustento político para justificar históricamente el iberismo del que Zentropa Iberia hace gala en sus manifiestos, porque siempre creeremos, que la identidad es algo que está por encima de las fronteras del presente.